A lo largo de los años he aprendido que para poder conseguir mi realización personal y poder ayudar a otros (amigos, familia, seres queridos…) tenía que conocerme a mí misma, conectar con mi esencia, dejar de esperar que las soluciones a todos mis problemas, o que mi felicidad, plenitud dependan de lo que está a mi alrededor, de lo externo… llegué a comprender que en mí estaba la clave.